“Creemos que el valor más importante que tiene nuestra moneda es la confianza y que aprendimos a realizar productos por nuestra cuenta”.
La Coperacha // Colaboración especial de Víctor Bernal García
Ciudad de México// 22 de julio de 2014
A punto de terminar el ciclo escolar, el Centro Educativo Jardines de la Hacienda (CEJH) en Querétaro, abrió sus puertas para que los niños desde preescolar hasta sexto de primaria tuvieran su Feria Multitrueque, y así dar cierre a un ejercicio de todo el año.
Comenzó el día con la logística de la feria, acomodo de sillas, mesas, pega de carteles y mantas. Santiago del tercer año se encargó de ayudar a colocar los carteles acerca de los productos y aconsejar en pequeñas dudas que tenían sus compañeros acerca de la feria.
La “Feria Multitrueque” inició con palabras de los niños que dieron una cálida bienvenida, en la que manifestaron la importancia y el porqué de los productos que decidieron elaborar. Por ejemplo, en preescolar decidieron hacer mermeladas con ayuda del árbol de mandarinas de la propia escuela, en tercer año hicieron repelentes naturales para mosquitos, mientras que los alumnos de quinto hicieron mezclas de tés.
“Nosotros hicimos composta por todo el año, para que con ella sus plantas crezcan mucho y estén muy sanas, además somos los encargados del banco de Verdilletes”, explica un representante del cuarto año de la escuela Jardines de la Hacienda.
Invitados especiales
Un momento especial ha sido la presentación de los invitados especiales del día, los niños de la comunidad del Zorrillo. Pues durante un año se vinculó a esta comunidad con la escuela Jardines de la Hacienda a través de intercambios que han realizado los pequeños en ambos espacios.
Como resultado, nació el Mercado Prehispánico de Trueque en el Zorrillo. También el Zorrillo Club, en donde se hacen intercambios de conocimientos. “Ellos nos enseñaron a hacer zorrillos de juguete y nosotros a hacer pulseras y pasteles… Yo comparto lo que sé y tú compartes lo que sabes.”, narra Jéssica, alumna del Centro Educativo Jardines de la Hacienda.
Verdillete
“En nuestra Feria utilizamos los Verdilletes, es la moneda que nosotros creamos y durante todo el año la obtuvimos al canjearla por acciones ecológicas. Creemos que el valor más importante que tiene nuestra moneda es la confianza y que aprendimos a realizar productos por nuestra cuenta”, agrega Jéssica.
Los padres de familia también han participado y adquirido productos que los niños elaboraron. Jabones de glicerina terapéutica, tés relajantes y para el stress, germinados de trigo, composta, ungüentos para la tos, plantas medicinales y hasta bloqueador solar; todos estos acompañados por explicaciones certeras de los pequeños prosumidores.
“Decidimos hacer pomadas para la tos con plantas medicinales, porque nuestros compañeros de preescolar en invierno tuvieron mucha tos, así ayudamos a cuidarlos”.
“Nosotras hicimos jabones, porque nos dimos cuenta con la investigación que hicimos, que los comerciales nos mienten, un jabón que hace espuma no limpia mejor, pero si contamina más”, cuentan algunos alumnos.
Banco de Tiempo y otras prácticas
Las mamás y papás del grupo de cuarto colaboraron con la mesa del Banco de Tiempo, en el cual intercambian saberes entre las personas que se han apuntado gustosas en participar. Así, la lista de oferta de servicios es larga, van desde los saberes como clases de bordado, yoga, hasta el tiempo de compañía.
Dentro de la práctica de gratuidad y economía del “don“, se organizó la mesa de “Gratuidad”, en la cual colaboraron muchas familias. Entre todas lograron una mesa abundante en juguetes, plantas, semillas, macetas, ropa, y lo único que se pedía para tomar algún artículo fue decir gracias, ese es el valor que le han dado a sus cosas.
En tan sólo dos horas, decenas de familias se envolvieron en varias prácticas solidarias en donde aprendieron de plantas medicinales, las propiedades del trigo, cómo hacer composta, trueque. Además, usaron una moneda comunitaria y participaron en una economía distinta como la “Gratuidad”.
Padres de familia
“Hemos aprendido mucho durante el año, los niños nos han enseñado bastante”, explica Gaby, una de las madres que trae el rostro iluminado por una enorme sonrisa. “Fue una experiencia inolvidable y quisiera que se volviera a repetir, porque fue muy importante para mí”, agrega.
Silvia González, maestra de los niños de cuarto grado, es una de las impulsoras de este proyecto. Con esta actividad que da fin al ciclo escolar, demuestra que en un mundo donde se promueve la desesperanza y el egoísmo, la competencia y la usura; siempre hay alternativas como son los valores que viven y hacen suyos de forma cotidiana estos niños. Son la solidaridad, el respeto, la confianza y las risas que tienen en abundancia para dar, recibir y devolver.
*Los usuarios del “Verdillete” participaran en la Feria Vida Digna de Dolores Hidalgo de este 2014 como parte del panel de monedas comunitarias nacionales.
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