Indispensable crear comités de género al interior de las cooperativas: Ariel Guarco.
Redacción La Coperacha
Ciudad de México // 10 de marzo de 2017
En un documento que aporta al debate sobre la perspectiva de género al interior de las cooperativas, Ariel Guarco, presidente de la Confederación Cooperativa de la República Argentina (Cooperar), llama a unir las luchas por los derechos de la mujer y la democracia económica.
En su texto titulado “Una alianza necesaria: derechos de la mujer y democracia económica”, Guarco analiza y propone ejemplos para la democratización económica con la participación de las mujeres como el camino para disputar el poder a los intereses del patriarcado.
“La solución a la desigualdad de género no puede limitarse a que la mujer escale posiciones en un sistema desigual”, plantea el también representante de Argentina ante Cooperativas de las Américas, pues incrementar la participación de la mujer en la lista Forbes tendría resultados magros en cuanto a equidad social, prosigue.
Plantea que desde el ámbito del consumo, la producción del hábitat, así como en los accesos a créditos, se requiere de la participación de la mujer en organizaciones cooperativas “para hacer oír su voz en función de sus necesidades” y disputar esos sectores a la economía concentrada.
Sin embargo, acota, eso sólo será posible “si efectivamente las cooperativas favorecen la participación de la mujer y no terminan reproduciendo los rasgos patriarcales de la sociedad en que están inscriptas”.
Guarco subraya la necesidad de crear comités de género en el movimiento cooperativo “para denunciar las asimetrías -al interior de las cooperativas- y promover los cambios necesarios” así como para articularse con los movimientos feministas. “La base para la construcción de una alianza firme entre la democratización de la economía y los derechos de la mujer deben ser los comités de género del movimiento cooperativo”, afirma.
Plantea el término de la “democratización de la palabra”, donde las cooperativas que gestionan radio, televisión o diarios, a través del acceso a las mujeres, pueden interpelar a grupos multimedios que reproducen estereotipos discriminatorios.
En el frente del trabajo doméstico y del cuidado, Guarco destaca que las mujeres han sido las que han quedado a cargo de ancianos, niños y enfermos, así como de labores de casa, lo que interfiere en su inserción en actividades reproductivas remuneradas, o cualquier actividad política, social y cultural, en igualdad de condiciones.
Ante ello plantea la responsabilidad de las políticas públicas para la creación de cooperativas del cuidado que coloque a las trabajadores en condiciones de no explotación. Pone ejemplos de cooperativas que se han desarrollado en el mundo con este enfoque como la Cooperativa We can do it! de Brooklyn, Nueva York; la Jamaican Household Workers Association (JHWA), así como el trabajo de la Federación de Asociaciones de Trabajadoras por Cuenta Propia (SEWA), en la India.
Guarco concluye con planteamientos a manera de ejes para lograr una alianza por la equidad donde se sumen esfuerzos entre quienes trabajan por la democracia económica desde la economía solidaria y el movimiento por los derechos de la mujer.
Consulta el documento completo aquí.
Foto: Emilien ETIENNE y Cooperar
