Buscan ser contrapeso a grandes inversores y aplicar la tecnología con visión de género.
Redacción La Coperacha
Ciudad de México // 20 de enero de 2017
La cooperativa Windfang e.G. FrauenEnergieGemeinschaft produce energías limpias y es la primera en ser administrada sólo por mujeres en Alemania, quienes buscan alentar a más mujeres a profesionalizarse y participar en el diseño de la tecnología para influir en la industria energética.
La cooperativa también se ha planteado entre sus objetivos, convertirse en un contrapeso a los grandes inversores en materia energética y buscan desde su organización ampliar el uso de la energía renovable y promover su uso consciente.
La organización, cuyo nombre podría traducirse como Comunidad de Mujeres con Energías, sostiene que la división tradicional del trabajo ha colocado a los hombres en la toma de decisiones estratégicas, entre ellas las tareas técnicas. El resultado ha sido una visión unidimensional de la eficiencia técnica desde los hombres.
Por ello buscan aplicar un nuevo enfoque, desde las mujeres, en el uso de la tecnología y aplicación a la energía para ellas y la población.
Historia
Windfang, con sede en Hamburgo, es una marca registrada desde 1992. Constituida únicamente por mujeres quienes se han profesionalizado en la planificación y construcción de plantas de producción de energías limpias y económicamente viables.
Su historia se remonta a 1991, cuando un grupo de socias imaginó construir una planta de energía eólica en un sitio potencialmente adecuado en Dithmarschen, Schleswig-Holstein, cuyo territorio está construido sobre una isla artificial.
El sueño tomó forma cuatro años después con la puesta en marcha de la primera planta de energía eólica de Windfang en el municipio de Hemme.
En la organización participan más de 200 mujeres que se han unido para trabajar activamente por una revolución energética. “Queremos apoyar a las fuentes de energía renovables como el viento, el agua y el sol, también el uso económico de la energía como la cogeneración activa a través de nuestras propias instalaciones”, indican en su página web.
Capacidad de generación de energía limpia
A finales de marzo de 1995 instalaron su primera planta de 450 kW. En ella se encuentra un aerogenerador al que bautizaron con el nombre de OYA, una diosa de Nigeria, maestra de las tormentas, diosa del río, la amante y protectora de las mujeres.
OYA tiene casi 43 metros de altura, con un diámetro de rotor de 35 m. Fue erigida en la planta ubicada cerca del Mar del Norte en Dithmarschen (Schleswig-Holstein), donde las condiciones son óptimas para las turbinas de viento.
Cuenta con un rendimiento de 950 mil kWh al año, suficiente para abastecer de electricidad a 300 familias de cuatro miembros anualmente. “Nos quedamos muy contentas y decidimos construir más turbinas eólicas”, expresan las integrantes de Windfang.
Actualmente operan aerogeneradores en diversas localidades de Alemania. Son propietarias de una planta en Hemme/ Dithmarschen, dos en Hüven / Emsland, tres en Volkmarsen / Nordhessen, cinco plantas en Hamburgo, una en Ochs Házte r y en la localidad de Francop tienen tres sistemas de 600W, además de uno llamado Blanca Nieves.
Blanca Nieves es el aerogenerador más reciente y el más grande instalado por Windfang, con 105 m de altura de buje y rotor de 90 m de diámetro. Construida en 2014, tiene una potencia de 2 MW, es coronada al sur por sus “hermanas” Anna, Berta y Cecilia, tres aerogeneradores más pequeños.
Cuentan además con un sistema de generación de energía eléctrica por módulos solares establecido en el techo del Museo de la Mujer de Bonn desde 1996. Esta planta posee una superficie de 50 m² que produjo el primer año más de 4mil kWh de electricidad, utilizados por Bonner Stadtwerke, grupo de servicios municipal de la ciudad de Bonn, Alemania.
Desde su instalación, los aerogeneradores de Wingfang han producido y distribuido más de 104 millones de kWh a la red. Mientras que su planta solar ha contribuido con 700 mil kWh.
Elección del modelo cooperativo
Las integrantes de Windfang examinaron la relación entre la motivación ecológica y la preparación de una infraestructura para las mujeres, a través de los cuales se profesionalizaran, se fortalecieran económicamente convirtiéndose en consumidoras responsables de la energía.
Las mujeres de Windfang eligieron el modelo cooperativo, por considerarlo como una forma jurídica que tiene la mejor base democrática posible en Alemania.
La cooperativa es integrante de la Asociación Cooperativa Weser-Ems eV, organismo de control que revisa periódicamente su situación económica, lo que representa una seguridad adicional para las socias y usuarias.
Fotos: Windfang e.G.
Con información de “Windfang eG FrauenEnergieGemeinschaft”