Redes o alianzas entre monedas locales son pasos intermedios antes de caminar a la moneda global no capitalista.
Redacción La Coperacha
Ciudad de México // 23 abril de 2018
El dinero es una relación social basada en la confianza, pero una de las perversiones de este sistema hegemónico es la imposición de un pensamiento de egoísmo e hiperindividualización, señala Claudia Caballero, integrante de la Red Multitrueque.
En una situación de crisis es normal y hasta sano que desconfiemos de instituciones corruptas públicas o privadas, menciona la también economista; las monedas comunitarias han rescatado el valor de la confianza y la han puesto como un elemento fundamental en la transformación del vínculo social.
A pesar de que las monedas comunitarias se han mantenido a pequeña escala, “han formado espacios que van agrietando el cemento capitalista”, dice Claudia, pero tienen muchos retos y limitaciones que es importante reflexionar para poder superarlos.
Por ejemplo, coexisten con un sistema hegemónico y con el dinero dominante, esto es bueno, “pero el reto está en que no se acomoden demasiado y pierdan su carácter revolucionario y transformador”, menciona la economista.
Ante esto se cuestiona ¿es posible ampliar o extender la confianza?, ¿podemos generan una moneda más amplia que las locales o comunitarias?
Algunas respuestas aluden a las criptomonedas o monedas electrónicas, sin entrar en ese debate, Claudia considera que hacen falta algunos pasos intermedios entre las experiencias locales y las monedas globales que permitan experimentar redes o alianzas entre procesos afines para escalar un poco la organización comunitaria.
Pero también que permitan retomar otros valores humanos para superar la lógica egoísta e individualista del capitalismo por ejemplo el don y el compartir.
Claudia señala que entre las experiencias micro comunitarias y las globales virtualizadas es posible construir una meso economía ecosistémica, “muy ligada a la naturaleza y basada ya no solo en el valor de la confianza sino también en el don y el compartir”.
Este será un excelente paso para el movimiento de moneda comunitarias, indica Claudia, “y desde México lo trabajando con las iniciativas del Ecomún y el tejido de monedas comunitarias”.
