El país asiático busca dominar tecnologías de energías alternativas.
Redacción La Coperacha
Ciudad de México // 17 julio de 2017
Con el desarrollo de ciudades cubiertas de vegetación China busca dejar de ser considerado uno de los países más contaminados del mundo y adjudicarse el lugar que dejó Estados Unidos como líder climático, señala Gabriel Palacios, el guía de la vereda sustentable.
La producción de energía limpia comienza a ser en China un campo en crecimiento y en los últimos años, este país asiático está en la carrera por dominar la gama de tecnologías, buscando enfrentar la contaminación y creciente demanda energética local.
Gabriel menciona que la Agencia Internacional de Energías Renovables reportó en 2015 que China gastó 103 mil millones de dólares en energías renovables y combustibles, con lo que superó en más del doble las inversiones, en este rubro, de Estados Unidos y la Unión Europea.
Ejemplos de la nueva visión ambiental de China son la mayor planta solar flotante del mundo, y la construcción del megaproyecto Liuzhou Forest City. Gabriel comenta que este proyecto fue “encargado por la oficina de Planificación Urbana del municipio de Liuzhou a la firma de arquitectos Stefano Boeri Architetti”.
Esta ciudad bosque de China será construida en la zona montañosa de Guangxi, al sur de China, donde oficinas, viviendas, hoteles, hospitales y escuelas estarán completamente cubiertas de árboles y plantas de más de 100 especies.
El guía de la vereda sustentable señala que “una vez terminada la ciudad bosque de Liuzhou, será residencia de 30 mil personas, capturará casi 10 mil toneladas de CO2 y 57 toneladas de micropartículas contaminantes al año”.
Dichas cualidades harán de ese lugar un asentamiento urbano sustentable y el primero de varias ciudades bosque que China proyecta construir en su territorio.