Actualmente el 25% de los cargos en la cooperativa lo ocupan socias.
Redacción La Coperacha
Ciudad de México // 12 de septiembre de 2016
Cuando le invitó su tío a trabajar en la cooperativa de Pascual, Evelia Martínez Suárez terminaba su preparatoria y no se imaginaba que más tarde sería socia y además la primera mujer en ocupar un puesto en el Consejo de Administración.
Evelia ingresó el mes de enero de 1986 a trabajar en la refresquera, ocho meses después de que la lucha obrera cambiara al Boing en cooperativa. Recuerda que al principio se trabajó por solidaridad, “no percibíamos salario, así duramos aproximadamente un mes”.
Martínez Suárez cuenta, a través de su propia experiencia, las vicisitudes para abrir el camino de la participación femenina en la dirección de la cooperativa.
El ejemplo lo encontró en el Comité de Lucha de Mujeres de Pascual, formado durante los días más intensos de la resistencia obrera, y ahora le permite afirmar: “Sin el comité de mujeres la historia de Pascual no hubiera sido la misma”.
La primera Lulú entre los Patos
Evelia llegó a la Pascual desarrollando tareas contables y en 1996 se convierte socia de la cooperativa.
En una asamblea de cooperativistas para elegir a sus nuevos consejeros, Evelia es propuesta para llevar la comisión de contabilidad e inventarios y gana la votación.
Hasta entonces sólo los Patos habían tenido las responsabilidades en el Consejo y es en aquella asamblea, realizada en el 2001, que deciden que ahora también la responsabilidad debía incluir a las Lulús.
La segunda encomienda que le confía la asamblea a Evelia es en 2012 y ahora como presidenta de la Comisión de Previsión Social.
En la cooperativa Pascual los cargos duran dos años y no se puede acceder a otra responsabilidad de manera inmediata, deben de regresar a su área laboral al menos un año y esperar que en una asamblea se les proponga nuevamente.
Confiesa Evelia que a los hombres, no sólo en la cooperativa, les cuesta “ver a la mujer como una compañera de trabajo”.
En Pascual avanza la presencia de las mujeres en el Consejo de Administración y en las comisiones, actualmente representan el 25 por ciento en la dirección.
El ejemplo está en la lucha del comité de mujeres
En la memoria de los obreros de Pascual está presente el papel jugado por el comité de lucha de mujeres, que surge en momentos críticos del movimiento.
Las esposas, madres y hermanas, que ya brindaban apoyo a sus familiares, se organizan colectivamente en el comité que surge en octubre de 1982 afuera de la Secretaría del Trabajo, cuyo séptimo piso estaba tomado por los trabajadores.
Repartían volantes, boteaban, hablaban en público, participaban en las comisiones, en entrevistas de radio, “En fin, no había lugar donde no estuvieran presente una mujer”, destaca Evelia.
Durante el IV Encuentro Nacional de Mujeres Cooperativistas, celebrado el mes pasado en el Senado de la República, Evelia recordó el papel de las mujeres en la lucha de Pascual que derivó en la conformación de la cooperativa.
Expuso que su cooperativa se debe al esfuerzo de los hombres que decidieron luchar por sus ideales pero “también gracias a la participación de la mujer es lo que es cooperativa Pascual”.
Para esta madre de tres jóvenes y jefa de familia, los encuentros entre mujeres cooperativistas “nos hacen ver que no estamos solas y saber que la participación de la mujer cada día es mayor”.
En su tarea desde Pascual, Evelia reconoce que la capacitación es la clave para alcanzar una mayor participación de las mujeres. Pero de nuevo voltea al pasado de la lucha y afirma “yo creo que sí es importante que como mujeres nos volvamos a reunir”.