Estudio concluye que los transgénicos atentan contra la soberanía alimentaria.
Redacción La Coperacha
Ciudad de México // 11 de agosto de 2020
El Consejo Nacional de Ciencia y Tecnología (Conacyt) publicó la investigación “Expediente científico sobre glifosato y los cultivos GM”, que documenta las afectaciones a la salud y al medio ambiente por exposición al herbicida, así como el uso y consumo de transgénicos a nivel nacional e internacional.
Este estudio se difundió en el contexto del anteproyecto en favor del glifosato que envió la Secretaria de Agricultura y Desarrollo Rural a la Comisión Nacional de Mejora Regulatoria, la semana pasada.
Los daños a la salud, que precisa la publicación, van desde dolores de cabeza recurrentes, irritación de mucosas, daños en distintos órganos, enfermedades metabólicas y neurológicas, hasta el desarrollo de cáncer de distintos tipos.
Además se ha detectado glifosato en fluidos como la leche materna, sangre y orina de agricultores y sus familias. Ejemplo de ello es el caso de la comunidad El Mentidero en Autlán, Jalisco, donde se analizó la orina de 53 jóvenes de secundaria y 93 infantes de preescolar y primaria, se encontró que todos tuvieron rastros de herbicidas y la sustancia más recurrente y peligrosa fue el glifosato.
El Consejo afirmó en la investigación que el maíz genéticamente modificado es un atentado contra la soberanía alimentaria y no ofrece ninguna ventaja para los campesinos y los pueblos originarios del país.
Es por ello que el estudio de Conacyt afirmó que “es apremiante” la aplicación efectiva del principio precautorio en las políticas públicas para la regulación del glifosato, transgénicos y otros agrotóxicos. Señaló que es posible “recuperar la soberanía y autosuficiencia alimentaría en la producción de maíz” sin la necesidad de utilizar estas tecnologías para evitar daños a la salud humana y ambientales.
El glifosato es el herbicida más utilizado en el mundo desde 1974 cuando fue introducido al mercado por Monsanto. Su uso se incrementó en 1,500% desde 1996 con la comercialización y siembra de maíz, algodón y soya genéticamente modificados. La expansión de estos cultivos aumentó 113 veces en volumen desde dicho año.
De acuerdo a esta investigación, cerca del 50% del uso global del herbicida en la agricultura se destina a cultivos transgénicos.
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