A la hora de las uvas, no pidamos deseos, atraigamos certezas, porque necesitamos un proyecto para todas y para todos con mucha soberanía alimentaria.
Redacción La Coperacha
Ciudad de México // 26 de diciembre de 2016
“Estamos terminando este 2016 con menos certezas de las que empezamos”, advierte Francia Gutiérrez, la jija del maíz, integrante de la campaña Sin Maíz no Hay País, recién desempacada de la Cop 13 con información del Convenio de Diversidad Biológica.
Francia indica que en la Cop 13 los resultados en general fueron en retroceso con respecto a la consulta a los pueblos y comunidades originarias y en materia de recursos genéticos, a los cuales, “se le da una vista de comercialización y privatización”.
La integrante de Sin Maíz No Hay País, también pide estar al pendiente de la resolución del Acuerdo de Asociación Transpacífica, y las disposiciones del Tribunal Moral de La Haya, en Holanda, donde se analizan todas las implicaciones de Monsanto y los daños económicos, sociales, a la salud y la economía rural que ha provocado esta empresa.
Por otro lado Francia recuerda las experiencias que dejaron algo positivo durante este año como la Demanda Colectiva contra el maíz transgénico “que sigue acumulando meses sin siembra comercial de maíz genéticamente modificado”, la lucha de cafeticultores contra la roya y las luchas sociales contra los mega proyectos, que además proponen experiencias de economía local.
Finalmente invita a marcar algunas fechas importantes para la soberanía alimentaria de México en el 2017, eventos como el aniversario 100 de la Constitución Mexicana, donde el artículo 27 es primordial “porque da cabida a la reforma agraria y a la tenencia de la tierra” y el aniversario 10 de la campaña Sin Maíz No Hay País.
Por eso, Francia propone que “este año a las hora de las uvas y los deseos, no pidamos deseos, atraigamos certezas, porque necesitamos un proyecto para todas y para todos con mucha soberanía alimentaria”.
