En lo próximo, exploraremos la evolución del movimiento de comercio justo y la posición precaria que hoy en día presentan las cooperativas dentro de lo mismo. Monika Firl
Si han tenido la oportunidad de visitar la sede central de la cooperativa de pequeños productores de café Maya Vinic, ya entienden el impacto positivo que tienen los productores bien organizados.
Monika Firl, CoopCoffees Gerente de Comunicación y Relaciones con los Grupos Productores Montreal, Canadá.
20 de marzo de 2012
Los Antecedentes
La base de Maya Vinic salió de la Organización Civil “Las Abejas”, catequistas quienes fundaron una cooperativa en los años difíciles después de la masacre de Acteal, diciembre 22 del 1997. Aquella fecha oscura es cuando paramilitares entraron a Acteal, disparando sin molestarse si fueron niños, ancianos o mujeres embarazadas quienes estuvieron matando. Al final de la cuenta murieron 45 almas inocentes quienes estuvieron reunidos en la iglesia comunitaria, rezando por la paz en Chiapas.
El día del entierro era caliente y terriblemente triste. Cada quien llegó cargando un ladrillo, que fue utilizado para construir un mausoleo a conmemorar los muertos. Pero solo era tres años después, con el nacimiento de la cooperativa de Maya Vinic, que pudieron crear la fundación para una vida nueva en la comunidad.
Los socios productores trabajaron fuerte: organizándose y legalizando su cooperativa, recuperando las tierras abandonados por la violencia en la zona, aprendiendo y enseñando mutuamente nuevas prácticas en compostaje, podas y conservación de suelos y comunicando al interno para fortalecer los lazos y al externo para encontrar un mercado más justo, todo eso en la búsqueda de una alternativa mejor a que lo que habían conocido hasta la fecha.
“Encontraríamos tantos retos al principio”, se acordó Antonio Ruiz, uno de los primeros socios y ahora gerente de la comercialización.
“Pero pesar de haber sido cazados de nuestros hogares, desplazados en campamentos de refugiados y de haber vivido de manera tan precaria en estos primeros años – nunca perdimos la esperanza. Nuestra cooperativa nos sirvió como una luz a seguir… que no solo nos mantuvo vivo económicamente, pero también que sirvió a mantener nuestra comunidad unida.”
La municipalidad de Chenalhó es ubicada en la región de “Los Altos” en Chiapas, unos pocos 70 kilómetros de la destinación turística San Cristóbal de Las Casas. Pero hasta estos “explosiones de violencia” la mayoría de los visitantes extranjeros y ciudadanos Mexicanos igual nunca hayan oído de Chenalhó.
Chenalhó es un estado con tierras muy fértiles, perfectamente aptas para cultivar café orgánico de alta calidad y muchos cultivos más. Pero pesar de la riqueza natural, Chenalhó es pobre en el acceso a servicios de salud, educación y agua y con una carencia de justicia económica y social.
Desarrollando Capacidad
Desde el principio, CoopCoffees ha mantenido una relación comercial estable y solidaria con Maya Vinic. Hemos visto como se han desarrollado exportando el café verde al comercio justo y vendiendo sus cafés tostados al mercado nacional… y muy recientemente lograron abrir una cafetería en San Cristóbal de Las Casas vendiendo directamente al consumidor final. Todo eso crea un mercado diversificado al beneficio de sus socios.
CoopCoffees, es una cooperativa de Estados Unidos y Canadá compuesta de 24 compañías tostadores asociados, tiene el objetivo de importar cafés orgánicos de calidad gourmet exclusivamente directamente de cooperativas de pequeños productores como la de Maya Vinic.
En 2012 proyectamos a comprar 1,700,000 kilos de café verde, o un estimado US$11 millones en contratos con cooperativas en América Latina, Asia y África. En la industria de café, eso nos clasifica como un “importador pequeño”, por lo cual tenemos la intención de aprovechar al máximo cada gesto. Buscamos como tener el mejor impacto en las vidas de los pequeños productores organizados, quienes consideramos como la columna vertebral de la creación de un comercio de café más justo para nuestra industria.
En el transcurso de los 10 años de nuestra relación comercial, hemos intentando a caminar juntos con los socios de Maya Vinic, con los tostadores apoyando a sus propuestas de desarrollo. Por ejemplo: Higher Grounds Trading en Traverse City, Michigan apoyando proyectos comunitarios de agua potable; o Alternative Grounds en Toronto, Ontario contando la historia de Maya Vinic, construyendo vínculos con organizaciones de desarrollo internacional y abriendo mercados en Canadá; o un sinfín de intercambios para mejorar el conocimiento sobre las exigencias del mercado, practicas de mejor control de la calidad, y técnicas de tostado de café gourmet.
“Con compradores solidarios como CoopCoffees, estamos en una posición de ir más allá de una simple relación comercial,” dice Luis Álvarez, asesor de Maya Vinic. “Juntos, hemos construido una alianza estratégica. Y el no tener que preocuparse cada año sobre dónde vamos a vender nuestro café, nos libera para poder enfocarnos en proyectos importantes como el mejoramiento de rendimientos y calidad y en la concepción de nuevos proyectos de desarrollo en las comunidades.”
