Comunidades manifiestan que minera nunca tendrá permiso para explotar su territorio.
La Secretaría de Medio Ambiente y Recursos Naturales (Semarnat) rechazó la Manifestación de Impacto Ambiental (MIA) del Proyecto Minero Ixtaca, propuesto por Minera Gorrión, filial de la empresa canadiense Almaden Minerals.
El proyecto de minería a cielo abierto pretendía realizarse en el municipio de Ixtacamaxtitlán, Puebla, y afectaría a pueblos indígenas aledaños, según habían denunciado las propias comunidades organizadas en la Unión de Ejidos y Comunidades en Defensa de la Tierra, el Agua y la Vida Atcolhua.
La información del rechazo de la MIA a la empresa minera se difundió a partir de un comunicado de la empresa a inversionistas. Posterior a su difusión las organizaciones Fundar, Poder, Consejo Tiyat Tlali, expresaron su complacencia por la decisión de Semarnat y expresaron estar alerta ante posibles pretensiones de la minera canadiense por insistir en si proyecto extractivo.
La autorización del MIA habría sido negada por no haber presentado los estudios científicos que pudieran establecer las medidas de mitigación, por lo que se consideró el “principio precautorio”, ya que el proyecto arriesgaría el sistema ambiental de Ixtacamatitlán.
Las organizaciones manifestaron que por más de una década las comunidades manifestaron su rechazo al proyecto de Almaden Minerals, e incluso, el 25 de junio de 2019, demostraron en una Reunión Pública de Información la inviabilidad del proyecto dadas “las graves e irreversibles consecuencias que tendría al medio ambiente” y la cuenca del río Tecolutla.
Recordaron, además, que el 22 de octubre de 2019, más de 40 comunidades entregaron a la Semarnat actas de asamblea con 3,500 firmas, donde expresan su rechazo el proyecto minero y niegan el consentimiento para su realización.
Las organizaciones y comunidades señalaron que Almaden Minerals ha mentido reiteradamente a sus inversionistas y al público, pues ha dicho que autoridades de la antigua Comisión Nacional para el Desarrollo de los Pueblos Indígenas, hoy INPI, había dicho que no era necesaria una consulta indígena ante ausencia de población originaria. Esa información fue desmentida por el propio instituto, apuntaron las organizaciones.
La empresa también ha dicho haber cumplido con la Evaluación de Impacto Social, estudio que nunca se ha hecho público ni entregado a los pobladores, señalaron las organizaciones y comunidades.
“Recalcamos que ni Almaden Minerals, ni sus filiales u otras empresas mineras han tenido o tendrán el permiso de las comunidades para explotar los bienes naturales de su territorio”, subrayaron.
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