Foto: @NGomezUrrutiaMX
Actores identifican temas pendientes y se anuncia reforma integral.
La madrugada del sábado 29 de abril legisladores de Morena y sus aliados del PT, PES y PVEM, aprobaron en la Casona de Xicoténcatl, sede alterna del Senado, las reformas a la Ley Minera enviadas por la Cámara de Diputados, así como 18 minutas más.
A través de esa reforma se quitó el carácter de actividad preferente a la minería, hecho que impide a las empresas mineras solicitar la expropiación de tierras, se les obliga a hacer consultas previas a pueblos originarios y firmar convenios con las comunidades comprometiendo una compensación. De acuerdo a la minuta, el Estado recupera la rectoría en el manejo de los recursos naturales del país.
Luego de la votación el senador por Morena, Napoleón Gómez Urrutia reconoció algunos de estos avances, sin embargo anunció que impulsará una reforma integral para acabar con abusos y violaciones a los derechos de los trabajadores y comunidades; que además incluya el tratamiento fiscal a las empresas.
Los recursos de la nación para beneficio privado
Por su parte el investigador mixteco, Francisco López Bárcenas, aseguró que el proyecto aprobado ya no es el que propuso el presidente de la República ni tiene sus fines. Ejemplificó que se aprobó que las concesiones alcancen hasta 80 años (30 en una primera etapa, prorrogable 25 y con preferencia en una licitación para otros 25).
Destacó que este cambio por sí solo da al traste con la recuperación de la soberanía que se pretendía pues “ningún proyecto de explotación minera requiere tanto tiempo para llevarse a cabo, pero los empresarios lo necesitan para ingresar con ellas al mercado de la especulación”.
Agua para minería
Por su parte, la coordinadora nacional Agua Para Todos, Agua Para la Vida si bien reconoció mínimos avances como la prohibición de residuos mineros en vasos y cauces federales, así como en áreas naturales protegidas, señaló que el principal saqueo va a continuar.
Las concesiones de agua para minería serán prorrogables por el tiempo que dure la concesión minera, se quita el régimen de excepción para agua de laboreo sin necesidad de concesión y sin respetar los límites de disponibilidad.
En cuanto al acaparamiento se quitó el tope al porcentaje propuesto de una cuenca o acuífero concesionado a minería y en su lugar se introdujo una exigencia de reciclar el 60% del agua en instalaciones.
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