El ex agente municipal de Paso de la Reyna, había solicitado medidas cautelares colectivas.
El ex agente municipal de Paso de la Reyna y defensor comunitario del Río Verde, Filogonio Martínez Merino, fue asesinado ayer y su cuerpo hallado en las inmediaciones del poblado Piedra Blanca, municipio de Santiago Jamiltepec, Oaxaca.
Durante 15 años, Martínez Merino fue opositor a los proyectos hidroeléctricos Paso de la Reina, y Río Verde; el primero impulsado por la Comisión Federal de Electricidad (CFE), el cual se encuentra suspendido, mientras que el segundo es un proyecto de la empresa Energy.
Cuando fue agente municipal, Filogonio Martínez solicitó, por acuerdo de la asamblea comunitaria, medidas cautelares colectivas para la comunidad luego de los asesinatos de otros 5 defensores comunitarios integrantes del Consejo de Pueblos Unidos por la Defensa del Río Verde (Copudever): Fidel Heras Cruz, Noé Robles Cruz, Raymundo Robles Riaño, Gerardo Mendoza Reyes y Jaime Jiménez Ruiz.
Las medidas cautelares ofrecidas por el Mecanismo de Protección para Personas Defensoras de Derechos Humanos y Periodistas aún están vigentes, mientras que los asesinatos de los defensores comunitarios siguen en impunidad a pesar de los señalamientos que vinculaban a caciques locales, al control del territorio y sus recursos naturales para proyectos de construcción.
Las organizaciones Copudever y Educa Oaxaca exigieron al Gobierno de Oaxaca y a la Fiscalía estatal su intervención para esclarecer los hechos, y a la Defensoría de los Derechos Humanos del Pueblo de Oaxaca solicitaron medidas cautelares para la comunidad de Paso de la Reyna y a la familia del defensor.
La abogada comunitaria Angélica Castro, acompañante de la defensa del territorio en Paso de la Reyna, entrevistada por El País, alertó del riesgo para las personas defensoras dependiendo de quién esté al frente de la presidencia municipal en Jamiltepec.
“Ahora las autoridades de Jamiltepec están a favor de los proyectos hidroeléctricos, pero en otras ocasiones han estado en contra, como las comunidades (…) Lo ven como una forma de negocio, tienen industria de extracción de grava del río”, señaló Castro.
Oaxaca se ha vuelto el estado más peligroso para las personas defensoras comunitarias, de los 54 asesinatos o desapariciones registrados por la organización internacional Global Witness, 18 ocurrieron ahí. En la zona de Paso de la Reyna acontecieron 5 de ellos.
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