La guía de la vida para el territorio con la cosmovisión de comunidades indígenas.
El pasado 15 de mayo, se llevó a cabo la presentación del Códice Masewal, una publicación como plan de vida que surge de los diálogos y talleres de integrantes y fundadores de la Tosepan, en el cual se imaginan los próximos cuarenta años de la unión de cooperativas que hoy agrupa cerca de 34 mil familias de origen masewal (nahuas y tutunaku) en la Sierra Nororiental de Puebla.
El fervor cultural se enmarcó en el contexto de la celebración del santo San Isidro Labrador, dentro de un armonioso cronograma de actividades con muchedumbre local y visitantes de diferentes zonas de la República y otras fronteras. La presidenta de la cooperativa Tosepan, Paulina Garrido, dio inicio a la presentación del Códice Masewal con una bendición de la tradición Tutunaku.
Entre los participantes se encontraban jóvenes estudiantes que colaboraron en la publicación. Nicasia de Jesús relató que se vio caminando en terracería “como en nuestros pueblos, y no importa dónde pises, porque no tienes que olvidar de dónde vienes”, impresión que deja manifestada en la portada del libro.
De igual forma, la estudiante Leticia Vázquez, explicó que el Códice “es un plan de vida en lo individual y en lo colectivo, es una guía de la vida. Uno como colectivo, comunidad y familia, y para el territorio”, un entronque que necesita ser apapachado y “amasewualizado”.
Además, destaca la importancia de lo que significa ser Masewal, ya que “muestra la cosmovisión de la comunidad, del pueblo en donde vivimos” y, como cualquier plan, “puede ser todo lo que deseamos hacer para el bien común, para el buen vivir”.
La publicación es un concepto de plan de vida a través de un proyecto educativo para los siguientes 40 años, en donde la cosmovisión de comunidades indígenas permanezca entre las nuevas generaciones, enseñanza que destacan Eckart Boege y Luis Enrique Fernández Lomelí.
Después de que en 2016 cayeran las amenazas de empresas privadas con la protesta de la comunidad por la defensa del territorio, “platiqué con Álvaro Aguilar Ayón y me dijo, en manera de reflexión, sabemos lo que no queremos, pero ¿Sabemos lo que sí queremos?, que tal si nos pronunciamos por un proyecto para los siguientes 40 años”, narró Eckart Boege.
Por su parte, Lomelí expresó que este plan de vida proyectado en el Códice, lo imaginaron a partir de la metodología de la pregunta ¿Qué significa ser Masewal en la actualidad? “Masewalidad, lo que es ser nosotros, es una provocación entre el diálogo y los jóvenes, que se construye como el árbol del Yeknemilis, con valores colectivos y comunitarios”.
La participación de la Fundación Rosa Luxemburg Stiftung
Por último, en representación de la Fundación Rosa Luxemburg México, Clara Meyra, reconoció la importancia intergeneracional en los pueblos, “estamos cosechando una sociedad para las nuevas generaciones”.
“La comunidad es maestra”, por ello “se debe de aprender del Códice y aprender de Tosepan, como procesos educativos, para mirar el presente y seguir construyendo el futuro”. Este libro “nos enseña a regresar a lo primero que hay que hacer como comunidad, serle fiel a nosotros mismos”, indica.
Es una publicación en dos tomos, bilingüe (nahuat masewal y español), en la convergencia de organizaciones hermanas, con miras a las siguientes cuatro décadas, en un contexto envuelto de un movimiento de resistencia regional en contra de megaproyectos como plantas hidroeléctricas, explotación de minerales a cielo abierto, proyectos turísticos y la privatización del agua.
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