Reconocen la democratización que ha vivido la cooperativa.
La cooperativa de cementos La Cruz Azul conmemoró en la planta de Lagunas, Oaxaca, sus 90 años de vida, donde realizaron ceremonias cívica y religiosa y se entregaron reconocimientos a los socios fundadores.
El presidente del consejo de administración, Víctor Velázquez, enfatizó en el proceso de democratización que ha vivido La Cruz Azul, así como un reconocimiento al acompañamiento de las mujeres en la recuperación de la vida cooperativa. Además, destacó la intensión de unificar al movimiento cooperativo desde el Consejo Superior del Cooperativismo (Cosucoop) y darle un realce internacional.
Por su parte, Guadalupe Armenta, presidente del Cosucoop, celebró la democratización de la cooperativa, hacia “un vida más constructiva y colectiva en la toma de decisiones”, para que este sea “un momento de consolidación y fortalecimiento”.
Hace nueve décadas
Los cementeros recordaron que hace nueve décadas se organizaron para conservar su fuente de empleo ante las intenciones de la empresa Tolteca de crear un monopolio en el Estado de Hidalgo, lucha obrera que concluyó con la formación de la cooperativa con 192 socios fundadores.
Amparados en la Ley de Expropiación por causa de Utilidad Pública y la intervención del gobierno de Hidalgo se decretó la expropiación de “La Cruz Azul” para ser entregada en manos de los trabajadores el 2 de noviembre de 1931, aunque la formalización se hizo en 1934.
La Cruz Azul ha conformado el “grupo de cooperativas azul” y un “polo de desarrollo cooperativo” en la localidad de Jasso, Hidalgo, también nombrada Ciudad Cooperativa Cruz Azul donde han formado escuelas, comercio, viviendas y hospitales.
También tienen fuerte presencia en la comunidad de Lagunas, Oaxaca, donde existe una planta de producción de cementos, pero lo más reconocido es la propiedad del club de futbol mexicano y actual campeón, el Cruz Azul.
30 años de opacidad
Durante más de 30 años la cooperativa fue dirigida por Guillermo Álvarez Cuevas, quien bajo la figura de director general, mantuvo el control de los recursos. Álvarez, hoy prófugo, fue denunciado por lavado de dinero, desvío de recursos y por opacidad en las cuentas.
Los cooperativistas que impulsaban un movimiento por la transparencia, realizaron una asamblea en septiembre de 2018 donde se nombra un consejo de Administración y Vigilancia que inició un proceso de recuperación de activos y plantas de producción, así como una auditoría que encuentra un boquete financiero por 42 mil 300 millones de pesos que estaban depositados en un fideicomiso administrado por Álvarez Cuevas y otras 9 personas.
En abril del 2021, se realiza una asamblea general donde se modifican las bases constitutivas, se elimina la figura de director general y se inicia un proceso de expulsión de los cooperativistas acusados del desfalco y corrupción.
La Cruz Azul reactivó en noviembre del 2020 su participación en el Cosucoop y desde entonces ha buscado impulsar un movimiento amplio que se busca materializar con el Encuentro Nacional de la Economía Social y Cooperativismo el 17 de noviembre.
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Los usurpadores Velázquez y Marrín andan a salto de mata. Tienen denuncias penales por todos lados. Un par de pájaros de cuenta. Tienen que irse a Oaxaca a donde lograron apoderarse con violencia y apoyo del corrupto gobierno actual, de la planta. Pero a la Cooperativa Madre en Cruz Azul, Hidalgo no pueden ni asomarse. Pronto se les venfrá el destino quemetecen. La cárcel.