Intercambia experiencias y siembra semilla de una futura relación comercial.
Redacción La Coperacha
Ciudad de México // 19 de diciembre de 2017
La cooperativa Pascual estuvo en Costa Rica para intercambiar experiencias con contrapartes locales, reunirse con funcionarios y legisladores, y sembrar la semilla de una futura relación comercial, en un país donde el impulso al sector social de la economía se refleja “para donde voltees”.
Producto del trabajo de vinculación del Centro Internacional de Investigaciones de la Economía Social y Solidaria (CIIESS) de la Universidad Iberoamericana se concretó en noviembre la visita denominada Pasantía de la Economía Social donde participó una delegación mexicana integrada por cooperativistas de Tradoc, Alcona, LF del Centro, entre otros.
“Para Pascual el viaje a Costa Rica fue muy importante porque nos dimos cuenta de la importancia que tiene la economía social y solidaria”, relata Alberto Méndez, tesorero del Consejo de Administración de Pascual. La delegación de los patos estuvo integrada además por comisionados de Educación, Vigilancia, Contabilidad y la Fundación Cultural Pascual.
Alberto Méndez describe que en Costa Rica las cooperativas son impulsadas por políticas públicas. El movimiento cooperativo agrupa a 594 cooperativas y un 887 mil 335 cooperativistas que representan el 21% de la población nacional, según el cuarto censo nacional cooperativo.
“Como experiencia nos enseña que si trazamos un buen objetivo y hacemos la unión de las cooperativas, apoyamos las que van naciendo, compramos nuestros productos, nos ayudaría a fortalecer la economía entre cooperativas y consolidar derrama económica, experiencia y conocimientos”, plantea.
Se visitaron las cooperativas CoopeVictoria (de producción agrícola), CooProNaranjo (cafeticultora), CoopeMed (de ahorro e inversión), CoopeSantos (de generación eléctrica) y CoopeAgri (de consumo), donde se planteó la opción de colocar productos de Pascual en sus anaqueles.
La posibilidad de que los jugos mexicanos lleguen a Costa Rica es un proyecto de largo plazo, confesó Méndez. A Pascual también le interesó concretar intercambios con las cooperativas agrícolas, pues el escenario en México no es el mejor para la producción de caña de azúcar, añadió.
En las reuniones de trabajo con diputados de la Asamblea Legislativa y de la Cámara Nacional de la Economía Social Solidaria (Canaess), se supo que Pascual es reconocida por los legisladores centroamericanos, pues conocen su historia y han visitado la planta de producción de Tizayuca, Hidalgo.
“Son similares las experiencias de un país a otro, la diferencia es que allá para donde voltees hay cooperativas”, apunta Méndez.
