En Santo Domingo, Coyoacán, se dispuso a liberar los espacios públicos sin respetar los derechos humanos de los ambulantes.
Redacción La Coperacha
Ciudad de México // 10 de marzo de 2014
“El año está muy canijo” menciona Clara Meyra, la Bartola, por las fallas que tiene el gobierno en la defensa de los derechos humanos en México, y porque apenas el año pasado se hablaba de las reformas, que hoy son una realidad poco alentadora, sobre todo porque han sido procesos no consensuados con el pueblo.
“Tan sólo en el DF, donde pensábamos que teníamos nuestros derechos garantizados, actualmente tenemos una serie de acciones que han privado de su libertad de organizarse a varias compañeras y compañeros, por ejemplo con las reformas a los códigos y todo el tema de represión a las manifestaciones”, señala Clara, defensora de derechos humanos.
Además remarca las acciones de “Limpieza Social” que el gobierno del Distrito Federal realiza en colonias populares como en el Pedregal de Santo Domingo en la Delegación Coyoacán, donde el actual delegado Mauricio Toledo en coordinación con la Secretaria de Seguridad Publica del DF se dispuso a liberar los espacios públicos de esta colonia sin respetar los derechos humanos de los ambulantes y personas que en ese momento fueron despojadas de sus pertenencias e implementos de trabajo.
“Y es que todo está relacionado” porque la precariedad de la economía en México ha generado empleos mal pagados y con derechos laborales sin reconocimiento por parte de las nuevas reformas, por eso la gente está en las calles, formando parte de las estadísticas del subempleo, añade.
Clara Meyra agrega que “este país tiene a más jóvenes en situación de pobreza y de marginalidad, y no digamos de las mujeres, que somos el 52 por ciento de la población nacional y que está sucediendo que los estados nos están criminalizando como en el Distrito Federal”.
Por eso es importante que el DF tenga una reforma política que le permita ser una entidad federativa autónoma y que decida sobre sus propias leyes, pero sobre todo que pueda ser un territorio en el que podamos participar democráticamente con transparencia.
“Si una reforma política en el Distrito Federal se tiene que dar, tiene que ser con las organizaciones y con las personas, porque en este momento cada vez es más común que las personas no confiemos en los partidos políticos ni en las instituciones” finalizo Clara.
La Bartola además, dedico está vídeo columna a tres procesos comunitarios muy intensos que han ocurrido en lo que va de este año como el que defendió a Yakiri, los que defienden al Comité Cerezo desde el trabajo por la defensa de las personas presas políticas y a Luis Villoro que el 5 de Marzo falleció dejando un gran legado filosófico.