Entrevista con Antonio Alcántara, presidente electo de la cooperativa.
Redacción La Coperacha
Ciudad de México // 12 de agosto de 2015
El primer domingo de junio se eligió en asamblea general a Antonio Alcántara como nuevo presidente del Consejo de Administración de la cooperativa Pascual. De entonces a la fecha, Alcántara, junto al resto de los consejeros elegidos han pasado un proceso de capacitación y transición para llegar bien afinados a sus nuevas responsabilidades.
En una pausa, previo a la toma de protesta que ocurrirá el 30 de agosto, Antonio Alcántara charló con La Coperacha sobre su nuevo cargo, la responsabilidad de representar a todos los socios, fundadores y nuevos, y los retos de posicionar a Pascual en el mercado, pero también en las calles, de la mano del movimiento cooperativista.
– ¿Fue sorpresivo ser elegido presidente de Pascual?
– Sí fue sorpresivo, sabemos que dentro de la democracia que se practica en la cooperativa cuando hacemos la elección de los cargos de dirección, es una posibilidad en mil. Somos mil socios en promedio y tenemos una posibilidad al igual que los demás.
– ¿Cómo ha sido el proceso de capacitación para asumir el cargo y la transición?
– La Comisión de Educación desarrolla un curso de capacitación en el cual abordamos diferentes temas desde administración, liderazgo, comunicación, planeación, en fin, una serie de elementos que durante el desarrollo de nuestras actividades en la administración van a ser fundamentales.
Estamos concluyendo esa capacitación y vamos a pasar a la integración en esos nuevos puestos y es donde nos vamos a dar cuenta de la realidad que vive la cooperativa. Y obviamente debemos tener esa visión de hacia dónde queremos llevar la empresa.
La responsabilidad que nos confiere la asamblea general es la de englobar a toda la cooperativa. Nos preocupamos de cada una de las áreas, de los departamentos, pero en sí nuestra responsabilidad ahora es toda la cooperativa.
– ¿Durante la capacitación conocieron modelos de otras cooperativas?
– Tuvimos acercamiento con Tradoc, que es una de las cooperativas más jóvenes, y con La Cruz Azul, una empresa ya consolidada.
– ¿Cuáles son los principales retos a los que se enfrentan?
– Hay muchos retos. Hoy en día el mercado donde participamos es muy competido y nos enfrentamos a situaciones adversas y desleales de la competencia, sin embargo nosotros tenemos muchas fortalezas, muchas áreas de oportunidad.
En esta nueva administración pretendemos hacer valer esas fortalezas en el mercado. Queremos seguir con esa filosofía cooperativista para tratar de ser un ejemplo en el modelo de negocio. Hacer ver que el modelo cooperativista puede ser la solución a muchísimas situaciones de desempleo.
– ¿Hacer notar el modelo cooperativista para desmarcarse de otro tipo de empresas?
– Por supuesto. La cooperativa Pascual se ha distinguido en muchas ocasiones por inculcar valores, por ejemplo, de solidaridad. Hemos tratado de contribuir y de estar con la gente en situaciones adversas, como desastres naturales. Eso es una fortaleza. Queremos que los consumidores vean en nosotros no a un proveedor de un bien o un servicio, sino que vean esa hermandad, porque finalmente formamos parte de esa sociedad.
– Sobre el impuesto a las bebidas azucaradas, ¿cómo le ha impactado en los productos de Pascual?
– Indudablemente cada impuesto que se grava afecta a la economía del consumidor final. Hoy en día ese impuesto nos ha impactado, sin embargo buscamos desarrollar productos que sean considerados dentro de la canasta básica, que sean considerados no como una bebida azucarada.
Estamos tratando que nuestros productos cumplan con esa calificación, con ese concepto de alimentos, no sólo para evitar ser gravados sino para que nuestro consumidor vea que nuestros productos benefician su salud. No son productos que causen nocividad, que cause alguna enfermedad degenerativa o que de alguna manera las agudice. Buscamos incursionar en ese sector, el de alimentos.
– ¿Cómo vas a responder a la confianza de todos los socios, a los nuevos y a los fundadores?
– Se ha venido inculcando en la cooperativa la filosofía de que todos somos socios, no hay distinción, finalmente todos gozamos de los mismos derechos y las mismas obligaciones, prueba de ello es que tanto mi compañero Ricardo Romero Cuauhtenco –elegido como presidente del Consejo de Vigilancia- como yo, pertenecemos a esa primera generación de nuevos socios y hoy tenemos la enorme responsabilidad de presidir el Consejo de Administración. Vamos a representar al Consejo de Administración de la cooperativa, no de los nuevos socios.
– ¿Cómo piensan mantener la presencia de Pascual con el movimiento cooperativo, la Nueva Central de Trabajadores, salir a las calles?
– La imagen que se tiene de nosotros es de lucha, de solidaridad, de resistencia, de tenacidad y hoy en día se ha demostrado, hemos hecho acto de presencia y de apoyo con las diferentes organizaciones. Hemos tratado de hacer presencia y apoyar los movimientos de las organizaciones. Buscamos que se respeten nuestros derechos y los derechos de los demás.
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