Proyecto de amaranto de Grupo Cooperativo Quali es reconocido por la FAO

Podrán abatir desnutrición en zonas de Puebla, Oaxaca, Veracruz, Tlaxcala, Morelos y Guerrero.

Redacción La Coperacha
Ciudad de México // 20 de agosto de 2018

La Organización de las Naciones Unidas para la Alimentación y la Agricultura (FAO) reconoció al Grupo Cooperativo Quali y Agua para Siempre como primer lugar de la convocatoria de las 10 mejores iniciativas de desarrollo rural sostenible para América Latina y el Caribe.

El proyecto mexicano obtuvo el primer lugar por “promover el sistema alimentario de amaranto orgánico como un innovador modelo de desarrollo rural sostenible de agricultura familiar para superar la pobreza”.

El modelo presentado por Grupo Cooperativo Quali tiene el sustento de 38 años de trabajo con las comunidades indígenas mixtecas, popolnas y nahuas de Puebla y Oaxaca, donde a partir de la siembra de amaranto en parcelas familiares y la creación de empresas sociales cooperativas por comunidad, se han logrado revertir condiciones de mala nutrición y tierras con baja calidad.

Para Raúl Hernández Garciadiego, diseñador del modelo del Grupo Quali, este reconocimiento llega en el “momento más adecuado de nuestra historia” porque desde hace tres años se comenzó a replicar la propuesta en comunidades mixes en Oaxaca con el mismo nivel de logros.

De acuerdo a la FAO, algunas de las iniciativas ganadoras serán sistematizadas y documentadas en profundidad, y aquellas con mayores posibilidades de ser replicadas contarán con la asistencia técnica de la FAO para presentar propuestas ante financiadores.

Garciadiego explicó que con el respaldo de la FAO será posible logar un “escalamiento horizontal” del modelo, con lo que podrán concretar 10 centros regionales Quali que puedan operar de manera más directa en zonas de Puebla, Oaxaca, Veracruz, Tlaxcala, Morelos y Guerrero.

Las apuestas de este modelo son colocar a la agricultura familiar, la creación de redes de economía cooperativa, la transferencia de tecnología y capacidades administrativas para mejorar los ingresos de las familias campesinas y abatir índices de desnutrición, señaló.

“La agricultura familiar es menospreciada por economistas neoliberales a pesar de que no hay nada más sostenible y nada mejor para fortalecer los mercados regionales”, pues se disminuyen riesgos de precios y se fortalece el cumplimiento del derecho humano a la alimentación, afirmó Garciadiego.

Con el modelo propuesto se ha logrado el acceso al agua en 252 localidades de 82 municipios en Puebla, Oaxaca y Veracruz; la integración de 2,100 familias de sembradores, la incorporación de 1,088 socios cooperativistas, la generación de 200 empleos formales; y rescatar 90% de la desnutrición infantil en la región.

Los gestores de las 10 iniciativas ganadoras presentarán sus proyectos en el IV Foro Internacional de Innovación para el Desarrollo Rural Sostenible de la ONU.

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