Incendian casas y negocios vinculados con narcotráfico y repliegan al Ejército, Guardia Nacional y Policía Estatal.
Desde la tarde del lunes 26 de julio y hasta el día de ayer, más de 3 mil habitantes de 86 comunidades indígenas y 18 barrios del municipio de Pantelhó, Chiapas, tomaron la cabecera municipal, incendiaron al menos 20 casas y vehículos de personas señaladas como extorisonadoras y sicarias, y replegaron a los elementos de la Guardia Nacional, Ejército y Policía Estatal que permanecía desde el 7 de julio.
A través de un comunicado se dijo que el grupo de Autodefensas El Machete no participó en la refriega, sino que fue la comunidad en su conjunto quien tomó la decisión y participó en la acción de tomar la justicia en sus manos ante la inactividad de las autoridades.
“El gobierno nos ha abandonado. Aquí no hay seguridad, paz ni tranquilidad, sólo miedo, llanto, temores, extorsiones, intimidaciones y ya ni hablar de la corrupción. El 26 de julio entramos a la cabecera a hacer justicia nosotros mismos, a catear las casas de los asesinos y narcos, no de la gente que es inocente ni de las familias que han sido extorsionadas por estos delincuentes”, señalaron.
“La gente se ha cansado de tanta humillación, asesinatos y violencia. Dejamos de soportar todas las extorsiones de los sicarios, de Dayly de los Santos Herrera Gutiérrez, con apoyo del ayuntamiento y de Raquel Trujillo Morales”, el alcalde electo, añadieron.
La tarde del lunes los pobladores exigieron a la Fiscalía estatal catear las viviendas propiedad de los señalados como sicarios, pero la autoridad se negó con el argumento de no contar con la orden de un juez. Entonces los pobladores, machete y palos en mano, ingresaron a las viviendas y saquearon tiendas vinculadas con extorsionadores.
De acuerdo a reportes de prensa al menos 20 viviendas fueron quemadas y cerca de 20 personas retenidas por parte de los pobladores.
El párroco de Simojovel, Marcelo Pérez Pérez, se reunió con representantes de las 86 comunidades y 18 barrios e informó de la intención de la Diócesis de San Cristobal de mediar en el conflicto y lograr la paz. Por su parte, los pobladores aceptaron la labor de intermediación, y nombraron una comisión de 20 representantes.
Los habitantes de Pantelhó cuestionaron: “Ahora le decimos al presidente de la República, ¿si aún nos quiere apoyar a nosotros los indígenas?, porque sabemos que ya tienen conocimiento de todo esto. ¿A poco no vale nada la vida indígena? Esto quedará a tu decisión, señor presidente, si no, mejor ya no siga interviniendo”.
Con información de La Jornada y Ángeles Mariscal
Notas relacionadas:
