Un año sin la defensora del agua, Carmen Santiago Alonso

Carmen Santiago Alonso en Valles Centrales, al fondo una olla de captación comunitaria (2018) // Foto: La Coperacha

Su principal legado se plasma en la primera concesión comunitaria del agua en México.

El día de ayer se cumplió un año de la partida física de la defensora del agua y las comunidades zapotecas, Carmen Santiago Alonso, cofundadora de la organización Flor y Canto y acompañante de la Coordinadora de Pueblos Unidos por la Defensa del Agua (Copuda).

Con dichas organizaciones y 16 comunidades de Valles Centrales defendió y ganó el reconocimiento a la gestión comunitaria del agua en Valles Centrales, así como la primera concesión comunitaria indígena en México, entregada meses después de su partida.

A través de una ceremonia convocada por Flor y Canto, se le recordó en la Explanada Municipal de San Antonino Castillo Velasco, su pueblo de nacimiento, donde la gente le decía con cariño Carmelina. Organizaciones como Agua Para Todos, Agua Para la Vida, también recordaron su partida.

Sembradora de agua
El principal legado que se le reconoce a la defensora zapoteca es la organización comunitaria y la defensa del agua en las comunidades campesinas de Valles Centrales integradas en la Copuda. En 2005, en medio de una sequía extrema y una veda presidencial que les impedía hacer uso del agua para labores agrícolas, las comunidades campesinas recibieron cobros de la Comisión Nacional del Agua (Conagua) hasta por 26 mil pesos, por un supuesto excedente de agua.

Estos cobros y la escacez de agua, pues los pozos de agua habían bajado hasta más de 40 metros, hicieron que habitantes de las comunidades de San Antonino Castillo Velasco, Maguey Largo, Tejas de Morelos, Santa Ana Zegache, San Pedo Apóstol, San Martín Tilcajete, la Barda paso de Piedras, El Porvenir, Santiago Apóstol, San Isidro Zegache, San Matías Chilazoa, San Pedro Mártir, San Felipe Apóstol, San Jacinto Ocotlán, San Sebastián y Asunción Ocotlán, implementaran una técnica de captación pluvial que al paso de los años regeneraría el nivel del agua en la región.

Dicha técnica de recuperación del agua fue documentada y recuperada por diferentes instituciones y comunidades. Gracias a ella, y a sus más de 300 obras comunitarias, a los habitantes de las 16 comunidades y a Carmen Santiago, se les conoce como Sembradores de agua.

La otra vía de la defensa del agua que Carmen impulsó fue la legal. Luego de 16 años de la veda presidencial que les impusieron a las comunidades, el 24 de noviembre de 2021 se publicó un Decreto oficial que revertía la veda y reconocía los derechos a la libre determinación de los pueblos, autonomía y administración coordinada del agua, hecho histórico que culminó en agosto de 2022 con la entrega de la primera “Concesión comunitaria indígena del Agua”.

Notas relacionadas:

Legado de Carmen Santiago perdurará por siempre: Flor y Canto

Entregan primeras concesiones comunitarias indígenas de agua en México

DEJA UNA RESPUESTA

Por favor deja un comentario
Por favor ingresa tu nombre