Colaboración especial, Claudia Caballero
El Foro Social Mundial 2024 que se llevó a cabo en Kathmandú, Nepal concluyó el lunes 19 de febrero con gran optimismo por parte de sus organizadores y asistentes. En esta decimosexta edición del Foro participaron más de 50 mil personas y se registraron mil 400 organizaciones de 98 países, que atendieron presencial y virtualmente a esta convocatoria.
El jueves 15 de febrero inició este gran encuentro internacional con una vibrante marcha donde se sintió la gran diversidad y compromiso de los movimientos sociales, principalmente de Nepal e India, pero acompañados por una amplia delegación internacional.
Los temas que acompañaron este foro fueron el de inequidad económica y social, justicia climática, discriminación, migración, equidad de género, paz, entre otros. Se reflexionaron y dialogaron en diversos formatos como: paneles de discusión, actividades autogestionadas y programas culturales.
Si bien el evento terminó con una plaza donde se presentaron 60 declaraciones, durante todo el Foro Social Mundial (FSM) nos unimos en una voz contra todas las guerras a los pueblos, pero en particular a la masacre que vive el pueblo Palestino, quienes tuvieron una presencia importante y estremecieron en sus intervenciones declarando: “todos seremos Palestina”.
Otro tema relevante fue el colapso climático. La preocupación por los desastres ambientales y la búsqueda de estrategias fue un tema recurrente en los paneles. Muy de la mano con la inequidad económica y social, se visibilizó la indignación por esta terrible situación que aún se padece en India y Nepal. Esto mientras también hablábamos de la inequidad económica causada por un sistema capitalista basado en la deuda, especulación y acumulación en muy pocas manos.
Ante colapso civilizatorio, seguir luchando por un mundo mejor
Se presentaron iniciativas y declaraciones para hacer contrapeso a los gobiernos de ultraderecha. Walden Bello (activista perseguido por el gobierno filipino) y Aleida Guevara (activista e hija del Che Guevara) advirtieron sobre este fenómeno.
A pesar de lo duro de los análisis que presentan una civilización en colapso, el encuentro de tantas personas en tantos lugares del mundo, luchando y creando un mundo mejor, era esperanzador. Así fue la participación de las mujeres, que fue activa y abundante. Sin embargo, Renu Adhikari, parte del comité facilitador nepalí y promotora de la Asamblea Global Feminista, indica que hubo mucha participación de las mujeres, pero aún nos falta en el camino de hacer feminista al FSM.
El lema “Otro mundo es posible” continúa uniendo muchas luchas en todos los continentes. A 23 años del primer FSM en Porto Alegre, la sociedad organizada, los movimientos sociales, los grupos y redes que todos los días creamos alternativas; nos seguimos oponiendo a la guerra sistemática que el capital hace en contra de los pueblos y la naturaleza, a través de las políticas neoliberales y el sistema financiero.
Quienes hemos participado, sabemos que el FSM no se trata solo de un extraordinario encuentro cada dos años, es un proceso vivo que, por su complejidad, se enfrenta a grandes problemas organizativos, de comunicación y visión política. Pero esa complejidad también va forjando una estrategia múltiple. Baste reconocer las muchas iniciativas asociadas al FSM y que se realizarán en los próximos dos años, como el FSM de India, el Foro Social de Interacciones, por mencionar algunos. Y por supuesto, el Foro Social Mundial de Economías Transformadoras que se realizará en Colombia en octubre de este año y que redes, grupos y movimientos latinoamericanos estamos impulsando.
En este sentido, el sábado 17 de febrero se realizó una presentación del FSM donde participó la doctora Lau Kin Chi de la Global University for Sustainability y el profesor Ashis Kothari de Global Tapestry of Alternatives como ponentes. Nos conectamos en línea con el equipo impulsor en Latinoamérica, entre los que se encontraban Salomón Sotelo de CINCOOP, Claudia Álvarez de la Campaña por un Currículum Global de Economía Solidaria, Rosana Milagrino del Movimiento Cultura Viva Comunitaria, entre muchos más. Esta presentación fue para sumar voluntades en distintos continentes para seguir construyendo un espacio de intercambio entre las experiencias de economías alternativas, así como un foro de reflexión ante el despojo, la inequidad y la guerra que el capital continúa contra el 99% de la población.
Tuve la oportunidad de coorganizar algunas actividades autogestionadas y participar en varios paneles. Desde la Campaña por un Currículum Global para la Economía Social y Solidaria presentamos un mapeo y sistematización de esta red, gracias a la colaboración de Claudia Álvarez una de sus principales promotoras y Laura Ruiz de Economistas sin Frontera. Hablamos de monedas comunitarias en un taller híbrido donde participó Heloisa Primavera, especialista y maestra de muchxs en este tema. Con la Global University for Sustainability, que tiene su secretariado ejecutivo en Honk Kong, participé en una sesión sobre Mujeres y cambio climático.
También recibí la invitación de la National Youth Equity Forum de India para participar en una sesión para hablar de inequidad. Y por último cada tarde se llevaban a cabo los paneles organizados por el Consejo Internacional del FSM, tuve la oportunidad de participar en el dedicado a Autoritarismo, capitalismo y alternativas económicas.
Cada edición del FSM es tan distinta, el país anfitrión, sus organizadores lo dotan de características únicas. En Nepal, entre altas montañas, coloridos, potentes y deliciosas especies, nos unimos a sus luchas y sueños. Esperaremos el próximo encuentro que se realizará en 2025, esta vez en el continente africano, en Benin.
Colaboraciones anteriores:
XVI Encuentro Internacional de Economía Solidaria en Colombia
